Pecas Remedios Caseros MIEL, Pecas Remedios Naturales

La miel es excelente para la decoloración pecas, ya que contiene enzimas que ayudan a aclarar la pigmentación de la piel. Además, al ser un humectante natural, es ideal para moisurizing su piel. Mezclar la miel y el agua y calentar ligeramente en un horno de microondas. Aplicar en la zona afectada y deje reposar por unos minutos. Por último enjuague el área con abundante agua tibia. Haga esto todos los días durante varias semanas. También puede hacer una mascarilla a base de hierbas, mezclando un poco de germen de trigo con miel caliente. Aplique esta mascarilla y dejar que repose durante unos 10 minutos. Enjuague el área con agua tibia y luego lavar de nuevo con agua fría. Repetir dos a tres veces a la semana durante un par de meses. Este es uno de los remedios caseros más eficaces para las pecas. Otra opción es hacer una mezcla de miel y yogur, y aplicarlo sobre las pecas durante 30 minutos todos los días hasta que obtenga los resultados deseados.

Remedio para las Pecas con crema agria.



2. crema agria

El ácido láctico presente en la leche agria puede ayudar mucho para deshacerse de las pecas. Es particularmente útil para las personas con piel sensible.

     Aplique un poco de crema agria en la piel afectada y deje que se seque durante unos minutos. En vez de enjuagar con agua, se debe limpiar suavemente apagando con un paño suave o una toalla. A continuación, aplicar un poco de crema hidratante. Este remedio no causará irritación o sequedad. Haga esto por lo menos una vez al día hasta que las pecas desaparezcan.

     Alternativamente, se puede enjuagar la piel afectada con leche agria diaria. Si usted no tiene leche agria, utilice yogur.

El zumo de Limón y sus beneficios para aclarar las PECAS!



1. Jugo de Limón

El jugo de limón es un ingrediente altamente eficaz para el tratamiento de las pecas, así como manchas de color marrón. El jugo de limón tiene propiedades para aclarar la piel que va muy bien blanquear las manchas oscuras en la piel.

     Aplicar jugo de limón fresco sobre la piel afectada y masajear suavemente la zona. Dejar actuar durante 10 a 15 minutos y luego enjuague con agua tibia. Haga esto dos veces al día.
     Otra opción es usar un lavado de limón. Corte un limón por la mitad y espolvorear media cucharadita de azúcar en ella. Frote suavemente la piel con él durante unos minutos y luego lavar la piel con agua. Hacer esto una vez o dos veces por semana en una base regular.